Los muchachos que integran a las barras bravas confunden demasiado lo que es la libertad de poder expresar sus sentimientos por su equipo, por el libertinaje; ya que en muchos casos se ha dado a conocer la muerte de personas que no tienen que ver nada en ese ámbito social. Los integrantes de estos grupos mayormente son de 17 años a 22 años mucho de estos adolescentes se refugian en las barras bravas para desfogar todo el resentimiento que puedan cargar, no obstante otros lo hacen para que se crean lo máximo, superior, el fuerte “no me meto con él”. Un 75% de los jóvenes integrantes a las barras bravas consumen algún tipo de drogas. En 21 meses, las barras bravas, como se denomina a los grupos que salen por las calles en una especie de procesión cuando hay un partido de futbol, robando a todo el que se cruce en su camino, han cometido más de cinco mil delitos y treinta y un homicidios. Yo me pregunto si en menos de dos años se llega a estas cantidades porque esperamos tanto tiempo y no se va haciendo algo por parar a estos jóvenes. Lo que influye a estos chicos a actuar de esa manera es la falta de amor que se pueda dar en el hogar es lo primero y luego viene lo que es las amistades que de una u otra manera influye en la parte emocional del individuo; también está la sociedad. Para poder prevenir a que estos jóvenes sean parte de las barras bravas primero es el afecto, amor, comprensión familiar sobre todo los padres ellos son los primeros que tienen que estar pendiente de que si su hijo está propenso a pertenecer a una barra brava. Se debe de crear áreas de recreación para que estos jóvenes se entretengan en un quehacer diario que busquen la manera de poder vivir pero sanamente ya que perteneciendo a estas barras pues lo único que conseguirán es de desperdiciar su vida, a la edad de 17 años uno tiene mucho porque vivir, disfrutar de los momentos familiares. Lo que el gobierno puede hacer es dar tratamiento psicológico a estos jóvenes, y de que la sociedad ayude, coopere por un cambio en su país. Mayormente en todo los países latinoamericanos la sociedad mira con un poco de desprecio a los barristas tanto así llamándoles “lacra” o en algún centro comercial no dejarlos entrar ya que los barristas en algunos países son considerados como rateros, pandilleros. Y es que en verdad esos adjetivos ellos mismos se lo han ganado pero si queremos un cambio la sociedad también tiene que cambiar para con ellos. También hay de lo que es de familia que por años mucho de esos integrantes de la familia perteneció a una barra brava pues los que vienen también tienen que seguir ese ejemplo. Pero para otras familias en donde no es así lo tratan mal, en el sentido de que si te veo por la calle no te conozco siendo tu propia sangre te puede tratar de tal manera que te baja totalmente, la moral, el sentido de vivir. Cuando son ellos que tienen que brindar ayuda a su hermano y no dejarlo. Lo que ha estos chicos le falta y mucho es el valor de sí mismo el quererse, el de tener su autoestima elevada el decir yo puedo salir de este grupo y ser una nueva persona para que así pueda cambiar sus hábitos de vida, ellos al querer cambiar a tener esa fuerza las cosas serán menos tediosas ya que en ellos está el cambio. El cambio tanto en él como en su país; a que ellos puedan valorar a su patria, que puedan reconocer su identidad cultural. De que su país no esté en boca de otro, por un grupo de personas que solo buscan “a alentar a su equipo” pero que no se dan cuenta que a la vez hacen un mal. En los países se deben promover lo que es la motivación a la cultura. Estos chicos son influenciados tanto por las malas amistades que puedan tener.
En conclusión los jóvenes pertenecientes a las barras bravas si o si necesitan ayuda tanto social como familiar, en lo psicológico como emocional, para que así se pueda ver el cambio en su país.
Rosa María Rayme Anco IB 201